martes, 18 de junio de 2024

DAMIEN HIRST EN EL MUSEO JUMEX 2024.


 

 DAMIEN HIRST INMACULADO O LOS JUGUETES DE EUGENIO.

Jef Koons y Damien Hirst son las dos joyas de la corona del arte anglosajón en el periodo 1980s al 2010s. Preguntan si la obra de Demian Hirst es arte. La respuesta es sí.  Pero no por el sentido formal (estructura del objeto) de las obras sino por sus efectos socio-estéticos. No olvidemos que los conceptos de arte se han transformado en el siglo XX.    Además, no olvidemos que la distribución de la obra de estos artistas tiene la plataforma de despegue de los centros mundiales de poder institucional y facticos por lo cual afectan, a manera de adoctrinamiento, la manera de valorar esos objetos en millones de personas.   En la medida en que esas obras alcanzan un alto nivel de influencia en las elites y publico de a pie de muchos países pasa al terreno de la geopolítica cultural. Los productos artísticos cuando tiene altos niveles de inversión económica e impacto social pasan al área política. Esto lo convierte en objeto de observación.  

A continuación, presento ocho comentarios acerca de la exposición: “Damien Hirst. Vivir para siempre (por un momento)”. (1)  La cual se presenta en el Museo Jumex de la Ciudad de México y considero importante compartir con ustedes.

1.- La faceta creativa de Damien Hirst comprende    22 años de 1988 hasta 2010 en una carrera de ascenso vertiginoso asociado con Charles Saatchi un poderoso comerciante de arte que se mueve en el potente mercado del arte británico y estadounidense.  Después del 2010 Hirst repite la fórmula de producción por motivos de mercado. (2)    Lo suyo es un arte y una estética que tiene 15 años de haber concluido y 38 años de haber iniciado.    La producción de un artista esta acotada por fecha de nacimiento de su primera obra, desarrollo y límite de inventiva.    En términos de arte contemporáneo la idea de artista emergente, carrera media y consolidado es una métrica de origen británico para clasificar a los artistas al momento de dar becas, de participar en concursos, poner precio a la obra y llevar el recuento de su producción o carrera creativa. De acuerdo a esto la artista una vez alcanzada la categoría de consolidado ya no importa si se agota o no su ingenio. En este nivel, el artista sólo le restaría dedicarse a administrar la aceptación de su obra por las elites con poder de compra y el respetable público interesado en el arte. Además, para colocarla en museos y colecciones. Esto es lo que está ocurriendo con Hirst después de todo ya no se podría cuestionar su estatus de artista consolidado en lo institucional.  Esta dinámica implica que una vez cerrado este ciclo de artistas consolidados también cierra su tiempo generacional. Y entonces, las instituciones podrán enfocar la atención a los nuevos valores con sus planteamientos artísticos de actualidad. Este concepto de vigencia lo tenía muy presente el crítico de arte Juan Acha cuando hablaba del dibujante José Luis Cuevas pues sostenía que su obra era una estética generada en 1960s y repetía su estilo de dibujo 20 años después en los 1980s. Y al mismo tiempo Acha hacia una llamada de atención a los críticos de arte que veían la obra de Cuevas como algo fresco sin que él presentara ninguna otra propuesta distinta.  Una artista en caso de no conseguir la consolidación puede ser toda tu carrera artista emergente, o carrera media, aunque tenga 85 años, significará que se quedó en una u otra categoría. Como ocurre con la mayoría de los artistas, pero esto no significa que su trabajo no tenga propuesta que contribuya con cultural del país. Muchas veces, significa que no empata con las modas ideológicas dominantes promovidas por intereses globales.

2.-Es interesante saber el momento socio-político y cultural en que surge una producción de arte para comprender el contexto, simbología y características ocultas de la obra.  Damien Hirst comenzó y desarrolló su obra en la turbulencia de distintos acontecimientos como, por ejemplo:  Finales de las presidencias neoliberales de   Margaret Thatcher (presidencia 1970-1990) y Ronald Reagan (presidente 1981-1989).  La caída de la unión soviética 1991.  Los años dorados de la hegemonía unipolar de EU (1991-2007).  Inicio de expansión de la OTAN 1999 en los países del Este de Europa.  La conformación y expansión de   la Unión Europea 1993-2009.  Establecimiento del Neoliberalismo con el Consenso de Washington y el libre mercado que significó apertura de los mercados nacionales (venta de empresas estatales por parte de potencias medias y países en vías de desarrollo).   El dominio absoluto de las instituciones globales como, FMI, BM, OCM, Fundación Rockefeller, Fondos BlackRocks, etc.  Las reuniones de líderes mundiales en Davos en busca de proyectos globalistas. La fortaleza de los Organismos no gubernamentales subsidiados por gobiernos extrajeras. Fortalecimiento de los centros de poder cultural mundial tras la derrota de la Unión Soviética. Entre otros.   

 Este fue el panorama en que germinaron los Young British Artists   (YBA, muchachos que exhibieron juntos en Londres 1988.)  a los cuales perteneció   Damien Hirst. Estos artistas se consolidan con el fin de la Guerra Fría y el triunfo absoluto de las democracias liberales anglosajonas de 1991 a 2007.

3.-Actualmente la configuración geopolítica ha tenido cambios desde el 2010 al 2024 y han surgido nuevos actores como China, India y el regreso de Rusia para disputarse zonas de influencia económica, política y cultural.  Respecto a México con el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte) 1994 quebraron muchas empresas mexicanas al no poder competir en una relación asimétrica contra las empresas trasnacionales y sus grandes fondos de inversión.   No es extraño que la fábrica de Jugos Jumex después de sobrevivir con éxito a la muerte de muchas empresas que implicó la firma del TLCAN, difunda valores, estéticas y conceptos dominantes de la geopolítica a través de su Museo Jumex con entrada gratuita o boleto de bajo costo. El arte es praxis no idealización de su ejercicio por lo tanto no existe la inocencia en el arte, existe la expansión de ideologías, los juegos geopolíticos, las políticas culturales de países y de las potencias dominantes, los negocios, las ganancias y pérdidas en distintos sectores de la industria cultural. En la realidad mexicana tan dependiente de la influencia de las potencias culturales parece inevitable que las instituciones privadas como el Museo Jumex haga eco de los artistas mejor posicionados en el mercado y los centros de poder mundial como en el caso de Jef Koons y Damien Hirst.  Así que, no es de extrañar que en exposiciones futuras se presente la obra de artistas consolidados y preponderantes de la escena internacional  como Maurizio Cattelan, Takashy Murakami, Banksy, entre otros, pertenecientes a la generación de Eugenio López dueño del Museo Jumex. Muchos de los artistas de la colección Jumex son representados por famosas galerías de élite como Perrotin, Marian Gootman, Marlborough, Gagosian, Saatchi, entre otras.  Pues el señor Eugenio López se mueve en el Olimpo del mercado del arte, como no podría ser de otra manera. 

Recordemos que gracias a su museo Eugenio López alcanza posicionamiento en muchos niveles y el reconocimiento de sus empresas a nivel mundial. Su museo le ayuda a usar la estética para su fábrica de jugos envasados en cartón, lata y vidrio consumidos por las masas populares y clases medias. Sin embargo, ya que el señor Eugenio López se mueve en las altas esferas de los ecosistemas del arte, también, podría contemplar hacer vínculos con poderosas galerías chinas y traer a sus artistas estrellas a México ya que se ven muy poco por acá. Después de todo China tiene el 29% del mercado del arte mundial y son los nuevos ricos del planeta. Es más difícil traer artistas de Rusia por la rusofobia y bloqueos económicos de la Unión Europa y la OTAN (Organización del Atlántico Norte). Aunque, aun así, estaría de perlas que trajera artistas rusos de arte contemporáneo.  Ya que, se supone que, el Museo Jumex esta fundado en ideas de las demócratas liberales que aceptan la competencia y el reconocimiento del los otros, Entonces debería traer artistas chinos, rusos o hindús.

 

4.- De acuerdo a como se fue gestando la obra de Damien Hirst desde 1988 hasta 2010 sus obras representan la época del triunfo absoluto de las democracias liberales esto significa el triunfo capitalismo anglosajón liderado por el super poder absoluto de USA que, por cierto, sólo duró 16 años (1991-2008 según John Mearsheimer).  En contraposición del emergente modelo capitalista de estado chino o el capitalismo hindú, ambas en ascenso, y que no son democracias liberales. De acuerdo a intelectuales del arte de la segunda mitad del siglo XX que hablaban del fin del arte. Entonces la obra de Damien Hirst que se creó en ese tiempo podría haber sido asociada al concepto del fin de la historia del arte, el fin del arte o el fin de la historia en referencia al libro “El fin de la Historia y el último hombre” de Fukuyama publicada en 1991. En ese libro el autor considera que después de la caída de la URSS y del comunismo todos los hombres se convertirían al capitalismo de la democracia liberal. Donde los más caros y extravagantes deseos del individuo se podrán cumplir bajo el estímulo económico y la libertad individual al margen  los valores de cualquier grupo social.  La exacerbación del individualismo conlleva el riesgo de perder la crítica y caer en el síndrome del niño tirano.  Una interpretación extrema de las democracias liberales para legitimar los deseos de los individuos implicaría que el valor de la crítica no sea importante. Bajo esta óptica en el terreno del arte se ve a la crítica como carente de poder o inútil. Menciono esto porque casi no existen espacios de crítica de arte en periódicos o portales de internet.  Y se ha visto muy poca critica de la obra de Damien Hirst en la actual exposición en el Museo Jumex no solamente porque su obra se gestó en una   democracia liberal donde se le otorga el reconocimiento al individuo y su emprendimiento sino porque su propuesta de valor le ha llevado a usar símbolos de fácil aceptación que la gente admira y quiere. Nos referimos a las joyas, los medicamentos y los símbolos técnicos de las ciencias.  En un mundo lleno de libertades.  ¿Se puede hacer critica de arte cuando el público sucumbe fascinado frente a obras hechas con diamantes, piedras preciosas, medicamentos de las empresas farmacéuticas trasnacionales de la Big Pharma, materiales quirúrgico o cuadros de puntos que todo mundo puede hacer?  Además, es difícil que un visitante cuestione el valor tanto estético como monetario de las obras expuestas porque las gemas son apreciadas en todo el mundo.  Una alacena llena de medicinas o un gabinete lleno de instrumental quirúrgico también son apreciados por qué significan salvar una vida o curar a alguien.  Una vitrina gigante de piedras preciosas significa belleza, abundancia y riqueza máxime si tienen espejo donde se refleja el visitante. Un cenicero gigante lleno de colillas de cigarro pone de acuerdo a la gente de que el cigarro es malo para la salud.  Incluso los animales como los tiburones, las ovejas y las palomas conservadas en vitrinas de formol azul, el público, los asocia a experiencias cuasi-científicas   porque los vinculan a museo de ciencias naturales, taxidermia o investigación biológica.  Con esto, podemos constatar, que muchísimas obras de arte contemporáneo no requieren de críticos. En esta exposición de Damien Hirst pareciera que no hay manera de establecer una crítica severa que cimbre los pilares que lo sostienen.  Y si existiera este tipo de critica a pocos les importa porque se vive en un ambiente de las democracias liberales cuyo valor es la libertad y distintos factores éticos y legales apuntan al reconocimiento del individuo.   La crítica de arte Blanca Gonzales Rosas de la revista Proceso parece que no ha dicho ni pio de esta exposición (al menos no he encontrado su columna de esta exposición).   Avelina Lesper en su canal de You tube criticó la exposición de Damien Hirst para sus seguidores sin causar aspavientos porque miles de personas hemos asistido al Museo Jumex a ver el cráneo con diamantes, los tiburones y mariposas.  Sin embargo, el profesional más adecuado para esta época es el curador y lo es desde los 1980s al menos en México. En esta ocasión es importante una curaduría que produzca textos que dialoguen con los intereses de museo, del mercado y que sea didáctico para los visitantes.  Con este objetivo se elaboran las fichas técnicas, los textos de sala. Y se publicó el Cuadernillo #31 “Damien Hirst. Vivir para (siempre por un momento)”. Texto curatorial de Adriana Kuri Alamillo. Publicado por Fundación Jumex Arte Contemporáneo 2024.  La importancia de ser curador es inobjetable en la actualidad. Comúnmente los curadores están formados con estudios en el área de humanidades, historia del arte, antropología, sociología, semiología, filosofía. Cuando se institucionaliza el reconocimiento de las necesidades individuales del humano prácticamente se valida cualquier acción y prácticas en los ecosistemas del arte. Y entonces, ya no interesa la crítica, aunque siga siendo importante, pero si, en cambio se valora más el trabajo del curador. 

 

 

 

5.- El público asistente al museo se topa con una encrucijada al momento de usar criterios para evaluar la exposición. Pues es difícil criticar a obras hechas con diamantes, piedras preciosas, medicinas, material quirúrgico. Es decir, se enfrenta a un arte que se presenta como inmaculado. Que pretende ser inmaculado e impoluto como el sistema económico que lo vio nacer.   Es difícil que un visitante cuestione las obras tanto en su valor estético, artístico o monetario. Dado que las obras están muy pulcras y hechas con gemas costosas. Además, las mariposas y palomas, aparte de bellas, son estimados por mucha gente.  Las cabezas de ovejas o de vaca en estado de descomposición con moscas remite a la transformación de la materia e incluso al esoterismo. En cuanto a lo artístico sólo basta con leer a un especialista o curador que escriba los textos más brillantes o convincentes acerca de la exposición.   

6.- En los años de su aparición las impecables piezas de alacenas de medicamentos de Damien Hirst se ve que están “rechinando de limpias”. Se puede pensar que representaron la higienización de un sistema en contra del socialismo soviético que se derrumbaba en 1991. También se puede considerar que la ampliación de la OTAN como medicina o instrumental quirúrgico para curar a los países que recién se independizaron de la URSS. O una asepsia contra de Rusia y China.  Sus exposiciones están pensadas para considerar a los objetos con acabados de la industria del lujo o los acabados pulcros de objetos industriales como los   muebles de hospitales, vitrinas con joyas y medicamentos de patente erigidos como la esperanza y la promesa del Consenso de Washington y el “libre comercio”. Se presentan como una fe en un sistema capitalista que produce un arte inmaculado y cuasi-religioso del que muchas personas no pueden escapar.

7.- La exportación de productos de las industrias culturales a otros países y sus conglomerados humanos es estratégico no solo por el negocio que representa sino para mantener la hegemonía de los países dominantes.  Por lo cual, considero, deberíamos anteponer reservas al momento de visitar el conjunto de obra que se expone en el Museo Jumex. Para empezar, podríamos no acercarnos pensando en la verticalidad de su poder e influencia, es decir, no sentirte subyugado por el poder del museo y de lo que se exhibe allí por muy pulcros e inmaculados que se vean.   Pues si no te identificas o no te conmueven los objetos expuestos en cualquier museo de arte contemporáneo lo mejor para la salud mental y física sería no sentir que estas fuera de lugar o que navegas en la ignorancia.  Porque es obvio que el arte considerado falsamente como universal no comunica lo mismo a un sujeto afgano, un saharaui o un compañero zapoteca de Oaxaca simplemente porque no existe el concepto arte universal global para todos. Al arte universal globalista le podemos llamar arte dominante (mainstream) pero fuera de eso existen otras realidades culturales.  Tampoco existe el público en general, lo que existe es un público interesado en un tema, dividido en los conocedores, los aficionados y los neófitos. No te pueden convocar como publico en general si a ti no te interesa un tema específico.  La mejor manera de ver exposiciones en museos es pensar que los artistas están ubicados en su tiempo y su espacio. Es decir, produjeron en una época, en un siglo o década, y en un continente, en un país, en una región y en una cultura que tienen intereses y valores particulares.  Con lo cual nos   podemos percatar de las pretensiones veladas de las instituciones culturales con sus exposiciones. Si bien es cierto las obras de arte tienen varios significados también  en valido expresar o leer  las distintas lecturas de la obra.  Sabiendo de antemano que los productos culturales tienen manejos ideológicos, de identidad cultural y geopolíticos. Para finalmente darse cuenta que las piezas en el museo alojan en su contenido tantas características positivas como negativas.

8.- Desde mi particular punto de vista la pieza que resultó interesantes en su momento de aparición son las vitrinas con vacas en descomposición con moscas como la que se vio en la exposición   Sensation: Young British Artists from the Saatchi Collection 1999, Brooklyn Museum. Y tuve la oportunidad de ver. Algo parecido a A haundred years. 1990, expuesta actualmente en la Galería Hilario Galguera 2024. ( 3) CDMéxico. Hay que decir que en las décadas de 1960 a 1990 había un ambiente de hacer arte estrambótico ya que era la inercia de la búsqueda de lo nuevo para superar la Modernidad. En la primera mitad de los años 1960s en Austria aparecieron los Accionistas Vienenses que hacían acciones con sacrificios de animales, sangre, viseras de animales, excrementos, y otros fluidos humanos. En los 1960s en México Alejandro Jodorovsky narra que él convocaba hacer happening en la Academia de San Carlos  y en uno de estos Manuel Felguérez  mientras pintaba un cuadro con tripas de pollo  Lilia Carrillo marchaba con uniforme nazi. También narra que un sujeto se comió una paloma viva como parte de un happening.  Pérez América me recordó que en los 1970s   llego a ver eventos con animales muertos.  Recordé que a finales en 1989 un estudiante llamado “el Checa” puso cabezas de perros en una exhibición colectiva en la escuela de arte de la Esmeralda.  Una cosa asquerosa para muchas mujeres que se fueron a quejar con las autoridades del ministerio público.  Trabajar con animales muertos fue parte de esa época.  Damien Hirst nos lo recuerda, pero a diferencia de los otros él si sabe comercializarlos.  

 

 

 

1.-       https://www.fundacionjumex.org/es/exposiciones/290-damien-hirst-vivir-para-siempre-por-un-momento

 

 

2.-   Damien Hirst en septiembre de 2008, y como algo sin precedentes para un artista vivo,10​ vendió una exposición completa, Beautiful Inside My Head Forever, por subasta en Sotheby's.11​ La subasta superó todas las previsiones, elevando a £111 millones ($198 millones de dólares), rompiendo el récord para una subasta de artista individual.

 

 

3.-   https://www.galeriahilariogalguera.com/exhibitions/damien-hirst-new-spot-paintings-and-a-hundred-years